¿Alguna vez escuchaste sobre esta técnica?, no te preocupes, nosotros te decimos cómo practicar el mindfulness.

¿Qué es?, hace varios años, se pensaba que la meditación solamente era para seguidores de las filosofías orientales, sin embargo, Jon Kabat-Zinn, creó el mindfulness, un programa que mezcla algunas enseñanzas budistas con un enfoque médico.

Mindfulness significa atención o consciencia plenas. Esta técnica, supone un cambio y una ruptura radical con la filosofía de vida típicamente occidental, muy centrada en el estímulo externo y en la que se concede tradicionalmente muy poca atención e importancia a escuchar tu propio cuerpo.

Entre los objetivos que puedes obtener practicando esta técnica es que concibas maneras más eficientes de enfrentar situaciones estresantes, como el control de un trastorno crónico, conflictos de trabajo, miedo, ansiedad, etc. Todo se basa en la respiración, la percepción de los sentidos y la percepción corporal.

¿Cómo lo practicas?

La práctica de mindfulness consiste en incorporar ciertos hábitos o rutinas que te ayudan a estar presente en el aquí y en el ahora, de una manera consciente y libre de juicios. Desde la compasión hacia ti mismo; no desde la lástima sino desde el respeto hacia tus propias emociones. Su gran ventaja es que se puede practicar en cualquier lugar, aunque para empezar te recomendamos una habitación oscura y donde los estímulos externos se reduzcan al máximo, ya que así resultará más fácil concentrarte en tu respiración y tus sensaciones.

Empieza ahora:

Existen técnicas formales e informales para desarrollar la atención plena, en ambas lo que se pretende es calmar tu mente al reducir la cantidad de pensamientos por cierto tiempo. Iniciar con una práctica de 5 o 10 minutos te dará grandes beneficios. Para ser consciente debes saber respirar, porque la respiración es una herramienta natural y sumamente eficaz para evitar que tu mente se distraiga.

• Aparta cinco minutos al día para estar quieto y en silencio, enfócate en tu respiración.
• Saborea un par de minutos cada bocado, para que estés consciente del acto de comer.
• Escucha y mira con la mayor atención a las personas con las cuales te relacionas.
• Toma pequeños descansos para ordenar tus pensamientos y recordar tus pendientes.

Ahora ya lo sabes, te invitamos a que vivas más conscientemente y te des permiso para sentirte. Verás que tu vida empieza a tener otro sentido y lograrás un mejor balance en tu bienestar emocional. ¡Decídete a cambiar y practica mindfulness!