Existen muchas cosas que haces en el día que podrían provocarte una lesión. Mejora tus habilidades motrices y evita problemas de salud.

Está demostrado que los Trastornos Músculo Esqueléticos (TME) son la primera causa de discapacidad. Son una de las dolencias de origen laboral más habituales. Estos trastornos afectan a millones de trabajadores en todo el mundo y suponen un costo de millones para las empresas.

Abordar de una mejor manera los TME ayudará a que evites lesiones y gastos. Una solución es recuperar y mejorar tus habilidades básicas del movimiento, tus capacidades motrices que desarrollaste desde que eras niño, por ejemplo: el balance, la alineación, el control, la adaptación y la coordinación.

Centra tu atención en estas habilidades motoras que puedes trabajar para que evites los Trastornos Músculo Esqueléticos.

1. Con desplazamientos: se trata de acciones donde tu cuerpo cambia su situación en el espacio. Algunos ejemplos serán: caminar, correr, saltar, deslizarte, rodar, caer, trepar, subir, bajar…
2. Sin desplazamiento: son el manejo y dominio de tu cuerpo en el espacio, sin que exista desplazamiento. Algunos ejemplos son: balancearte, inclinarte, estirarte, doblarte, tirar de algo, colgarte, equilibrarte…
3. Manipulativas: en este caso, tu cuerpo maneja uno o varios objetos. Algunos ejemplos son: lanzar, recibir, golpear, manipular…

Si desarrollas y trabajas mejor todas estas habilidades además de que evitarás lesionarte, también tendrás un mejor rendimiento a la hora de hacer ejercicio. Puedes generar o recuperar habilidad siendo progresivo con los movimientos como con la complejidad del mismo.

Recuerda, si sufres alguna lesión más severa no dudes en consultar a un experto que esté relacionado en esta área o a un fisioterapeuta.