Siempre que alguien me pregunta las razones por las cuales amo el yoga desde hace años, la única respuesta que puedo dar es, porque me hace sentir increíble. Además, me gusta recomendarlo como una de las prácticas que todos deberíamos incluir en nuestros días, casi casi, como un estilo de vida. Más ahora que estamos en un momento súper raro e inusual. Así que, aprovechando que el Día Internacional del Yoga se acerca, me gustaría que conozcas algunos de sus beneficios, porque si te motiva, podrías intentar algo nuevo e incluirlo en tu rutina.
Más que una mente en equilibrio
El yoga para muchas personas sólo significa meditación y calma. O sea, sí tiene que ver, pero no lo es todo. Para mí, es un ejercicio súper completo, porque incluye algo de fuerza, equilibrio y mucha coordinación en todas sus posturas. Claro que tú puedes elegir otra forma de hacerlo para que se adapte con tus objetivos.
Por ejemplo, una de las cosas que me urgían y que gracias al yoga logré, era que los dolores musculares le dijeran bye a mi cuerpo. Desde que empezó el home office, mi espalda no la estaba pasando nada bien. Pero ahora, con los estiramientos y varios ejercicios de respiración, ¡uff!, está como nueva.
Claro que hacer yoga también tiene su chiste, aunque la vean muy tranquilita y todo, sí que te hace sudar. De hecho, hay asanas que, justamente, están pensadas para quemar calorías. También, hay otras que le dan más flexibilidad a tus músculos o, si prefieres algo más intenso, puedes fortalecer diferentes zonas de tu cuerpo, como los brazos, estómago y piernas. Recuerda que lo importante es mantener la motivación haciendo los ejercicios que más disfrutas y, quizá, probando algunos nuevos.
Lo que obviamente no puedo dejar de mencionar son los beneficios psicológicos y emocionales de practicarlo en estos días. Sin importar el horario que elijas, te hará sentir relajado y súper bien. Pero justo ahora es cuando más lo necesitamos, porque liberarnos del estrés y olvidar un poco lo que pasa afuera, se ha convertido en algo necesario para mantener nuestra paz interior.
En pocas palabras, la solución para muchos de los problemas que ahora tengo, es el yoga. Si me duele la cabeza, yoga. Si tengo problemas de digestión, yoga. Y así sucesivamente, porque realmente es súper bueno. La verdad es que está bien padre que los profesores en el mundo estén dando clases online, porque su acompañamiento siempre nos alienta a hacerlo mejor, sus palabras nos hacen falta. Por eso, si también a ti te gustaría vivir todos estos cambios en tu cuerpo y en tu vida, visita el canal de Sport City en YouTube para ver tu clase favorita del día en el lugar y a la hora que quieras. Y recuerda, namasté.
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