Si ya estás decidido a cambiar tus hábitos alimenticios con la ayuda de un buen nutricionista, ¡checa estos tips antes! 

Acudir con un dietista, nutriólogo o nutricionista no siempre se relaciona a querer bajar de peso, muchas veces se trata de buscar un guía para modificar hábitos alimenticios y llevar una alimentación y vida más saludable. Si este es tu caso, aquí te compartimos algunos puntos a considerar antes de elegir tu nutricionista ideal, ¡así que toma nota!

Consejos para elegir un buen nutricionista 

1. Es una persona preparada y titulada 

Lo primero que tienes que asegurar es acudir con un profesional que tenga la experiencia suficiente para atenderte, verificando su cédula profesional, acreditaciones y especialidades. Lo común es que tenga una formación en Nutrición Humana y Dietética, ¡y entre más y mejores diplomados mucho mejor!

2. Hace una adecuada valoración inicial 

Un buen nutricionista sabe que la primera cita es de valoración inicial, momento en el que te hacen una serie de preguntas variadas para conocer todo tu historial, hábitos, costumbres, entre otros aspectos. El tiempo estimado de una sesión es de 1 hora, si lo hace en 5 minutos significa que no es un buen especialista. 

3. No hace promesas 

Si te promete bajar de peso de manera rápida y fácil, desconfía. Un buen nutricionista sabe que cada cambio lleva un proceso y que no ocurre de la noche a la mañana. Además, bajar de peso debe ser de manera gradual con la alimentación correcta, sin resultados apresurados, así que los objetivos que tu nutricionista te plantee deben ser realistas y alcanzables. 

4. Su especialidad va de acuerdo a tus necesidades

Existen nutricionistas especializados en problemas de tiroides, algunos otros en deportistas y otros en dietas vegetarianas y veganas. Depende de cuáles sean tus propósitos o patologías, asegúrate de acudir con el adecuado.

5. Te supervisa de manera continúa

Además revisa y modifica el plan alimenticio cuando es necesario, para ello es la valoración inicial y así poder desarrollar una dieta personalizada. Si notas que las recomendaciones o dieta que te proporciona es generalizada con el resto de sus pacientes, entonces ahí no es.  

6. Sabe que la salud es lo más importante

El objetivo de un buen y preparado nutricionista es cuidar la salud de sus pacientes a través de hábitos alimenticios correctos. Un verdadero profesional no se enfoca en el peso, pero sí en tus hábitos de conducta, tiempos de comida, comidas diarias y porciones. 

7. Está en contra de los productos “milagro” 

Similar al no hacer promesas, los nutricionistas saben que no existen las dietas milagro ni los suplementos que hagan todo el trabajo. Tampoco te intenta vender productos dietéticos. 

8. Brinda confianza 

Al fin y al cabo es tu doctor, así que debe darte la confianza de que tú le cuentes cualquier problemática, responda tus dudas y no te juzgue por tus hábitos alimenticios, preocupaciones u objetivos 

9. Te da tu primera cita sin pauta 

Un nutricionista no te va a dar una planeación o pautas a seguir desde la primera consulta, ya que necesita tiempo para hacer un seguimiento y análisis. Quizá te haga recomendaciones, pero será hasta las siguientes sesiones que te proporcione una dieta personalizada. 

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