El lenguaje es un conjunto de conceptos, ideas y significados que desde el momento del nacimiento los niños van almacenando y organizando como una biblioteca. A partir de ésta encontramos la habilidad de escuchar, ordenar y añadir nuevas ideas (lenguaje comprensivo) o la habilidad de expresar y comunicarlas (lenguaje expresivo).
A continuación te enseñamos cinco actividades que puedes hacer desde casa para estimular el lenguaje:
1.- Escondidas.
Con ayuda de los juguetes favoritos de tu niño comenzaremos escondiéndolos en lugares poco visibles en casa y preguntarle, por ejemplo: “¿dónde está el carro?” y él tendrá que buscarlo. Dependiendo la edad de tu niño podrás darle el grado de dificultad. Esta actividad ayuda a incrementar el vocabulario, la atención y el seguimiento de indicaciones.
2.- Palabras nuevas.
Ante palabras nuevas, siempre podemos proponerles que escojan entre dos opciones, una conocida y una desconocida, por ejemplo: “¿dónde está la moto?”, dando a elegir entre una moto y un coche, siendo el coche conocido y la moto un posible vocabulario nuevo. Con este juego también ayudamos al niño a reconocer su entorno y verbalizar lo que ve.
3.- Juego de los listones.
En diferentes partes de tu casa amarra listones de diferentes colores, por ejemplo: en una silla o una mesa y dile al niño: “Vamos a correr hacia la mesa”, tómalo de la mano y vayan hacia él, al llegar dile “llegamos a la silla, ahora tenemos el listón rojo” y hagan un baile con el listón diciendo “arriba el rojo, abajo el rojo, damos vuelta con el rojo”. Después, corran a otros lugares que tengan listón, diciendo cada vez hacia dónde van y bailando con el listón que les haya tocado. Luego vuelve a poner los listones sin amarrar en los lugares y pídele al niño que vaya solo y que haga los bailes, cuando llegue al destino felicítalo por su logro.
4.- Mi libro de cosas favoritas.
Con ayuda de revistas y fotografías haremos un libro de recuerdos de las cosas favoritas o familiares del niño y las reuniremos en categorías como: comida, fruta, juguetes, animales, ropa, etc. El propósito de esta actividad es que el niño tenga un material didáctico que ayude a reforzar el vocabulario adquirido.
5.- Crear un entorno adecuado para el aprendizaje.
Deja un espacio en casa, por ejemplo: la habitación del niño, para su desarrollo y aprendizaje y que pueda dar rienda suelta a la creatividad y al movimiento, le ayudará a que vaya poco a poco ampliando su vocabulario.
Finalmente para que los niños aprendan a articular todos los sonidos correctamente, deben tener una buena deglución, masticación y respiración. Por ello, debemos darles una alimentación variada con algunos alimentos que les obliguen a masticar y a activar los músculos de la cara así como la lengua
Ana Karen Castro Templos
Lic. en Psicología
Coordinadora de Actividades Infantiles
Sport City Insurgentes
Entrena sin costo ahora