Jugar con los niños no sólo mejora la convivencia en el ambiente familiar, también puede ser una buena oportunidad de impulsar el desarrollo de las habilidades cognitivas de los niños. Jugar con ellos puede servir para enseñar valores y dar lecciones de un modo agradable y divertido.

Te damos 5 actividades para hacer con tu hijo en casa:

1.-  Clasificación por colores

Material: Cajas o bandejas de colores (rojo, azul y amarillo) juguetes o piezas de ensamble de los mismos colores.

Le proporcionarás al niño las tres cajas o bandejas  y los objetos de colores, le pedirás que tome un objeto de color azul, por ejemplo: “dame el crayón azul”, ahora colócalo en la bandeja del mismo color,  “dame el crayón amarillo”,  y así sucesivamente. Posteriormente puedes enseñarle los colores por comparación: “Tu camisa es azul como mi pantalón”, “¿son del mismo color?”,  “dame un juguete que también sea azul”  Puedes pedirle que haga torres  de un solo color con los bloques.

2.- Reconociendo  diferentes texturas

Material: Utilizar diferentes  objetos que tengas en casa como plástico, lija y metal. Incluso si tienes mascotas pueden ayudarte a realizar esta actividad.

Invitarás al niño a tener contacto con los materiales, animales y le explicarás: “el gato es suave”, “el perro tiene la nariz fría y húmeda”, “el tronco del árbol es duro”, “el algodón es suave”, la lija es rasposa”, “el metal es frío y duro”, permite que el niño toque diferentes objetos sin dejar de supervisarlo.”

3.- Reconociendo diferentes temperaturas

Material: 3 Recipientes de plástico, agua fría y caliente

Con ayuda de un recipiente invitarás al niño a jugar con agua tibia, fría y un poco caliente, con mucho cuidado, que sea temperatura que el niño pueda tocar. Trabajarás las temperaturas del aguay le explicarás en donde puedes obtener agua fría, por ejemplo, en el refrigerador,  el agua de un rio es fría, el agua la ponen a calentar en la estufa para que esté caliente, y puedes mezclar un poco de las dos para que sea tibia.

4.- Semejanzas y diferencias

Material: Vasos, hojas, pelotas, piedras, popotes, cucharas, todo lo que se te ocurra y que tengas en casa, será de 2 tamaños (grande y pequeña).

Le proporcionarás el material al niño para que observe las diferencias. Luego le darás tres objetos, dos de un mismo tamaño y el otro de diferente tamaño para que observe cuales son iguales y cuáles no. Realiza la misma actividad con los opuestos: largo-corto, alto-bajo, delante-atrás, cerca-lejos. Utiliza también colores opuestos (blanco/negro). Con estas actividades también estimulas la concentración.

4. Agrupar y clasificar

Material: Botones de diferentes tamaños o si lo prefieres tapas de botellas.

Con supervisión le proporcionarás al niño botones de dos formas, tamaños y colores diferentes, le pedirás que ponga juntos todos los que son del mismo tamaño, color y forma. Recuerda que el niño solo es capaz de agrupar por un solo criterio, por lo que le irás complicando la actividad poco a poco, puedes variar el material, darle bloques de plástico, piezas de fomi, etc. Con el mismo material puedes trabajar clasificación de tamaños, cual es más  grande, más pequeño, el que es diferente, los que son del mismo color, forma, incluso hasta meter ilustraciones, trabajar categoría  con animales, plantas, frutas, etc.

Elaborado por:

Joana Jazmín Hernández Estrada

Lic. En Pedagogía

Coordinadora de Actividades Infantiles

Sport City Lindavista