Una alimentación inadecuada, falta de actividad física y consumo excesivo, son factores de riesgo para desarrollar enfermedades y no alcanzar un balance nutricional para la vida. 

Las enfermedades crónicas no transmisibles que evitan alcanzar un balance nutricional para la vida, como el tabaquismo y el alcoholismo, se caracterizan por ser de larga duración. Por otro lado, su evolución es generalmente lenta y resultan de la combinación de factores genéticos, fisiológicos, ambientales y conductuales.

Los principales tipos de enfermedades no transmisibles son: 

– Enfermedades cardiovasculares: ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
– Cáncer.
– Enfermedades respiratorias crónicas: enfermedad pulmonar obstructiva crónica y asma.
– Diabetes.

Estos casos clínicos son prevenibles en gran medida. Se estima que, en caso de eliminar los principales factores de riesgo, un 80% de las enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y diabetes tipo 2 podrían evitarse, al igual que un 40% de los cánceres.

¿Cómo prevenir enfermedades y lograr un balance nutricional para la vida? 

Para controlar y prevenir enfermedades que afectan la calidad de vida es importante reducir los factores de riesgo asociados a ellas.

El primer paso es enfocarse en llevar un estilo de vida saludable, donde la alimentación, el ejercicio, el descanso y la salud mental deben estar en equilibrio.

La alimentación es un elemento fundamental para mantener una buena salud. Esta debe incluir calidad, cantidad y hábitos alimenticios para lograr el bienestar del ser humano.

Para lograr que no te falte ni te sobre ningún elemento, se deben tener en cuenta estas recomendaciones al momento de elegir tu alimentación diaria:

1. Aportar la cantidad óptima de hidratos de carbono, grasas y proteínas.
2. Contener las suficientes vitaminas y minerales.
3. Distribuir adecuadamente a lo largo del día según tus actividades y entrenamiento.
4. Mantener una buena hidratación.

La nutrición balanceada se refiere a la ingesta de alimentos en relación con las necesidades dietéticas del organismo. Todo radica en lograr un equilibrio, comer con moderación todos los grupos alimenticios y no olvidar que los excesos hacen daño.

Otro gran consejo es que cada día al elegir los alimentos que vas a consumir, que estos preferentemente sean hervidos, asados, al horno y al vapor, tratando de evitar o disminuir las comidas fritas. Además, las cantidades y cualidades deben ser lo más naturales posibles. De esta manera la alimentación diaria tendrá el poder de fortalecer el organismo y evitar enfermedades. 

El mantener la salud o acelerar su declinación es decisión de cada uno

Te invitamos a que te acerques a nuestros especialistas en alimentación y entrenamiento, quienes te asesorarán para encontrar el equilibrio perfecto en tu día a día y alcanzar un estado de salud óptimo, tener una composición corporal adecuada y un cuerpo funcional.

Está en ti tomar decisiones saludables y encontrar el balance nutricional para la vida.