Pensar en hacer ejercicio sin cansarte parece un imposible, pero en realidad hay una serie de consejos que puedes seguir para retrasar la aparición del agotamiento cuando realices tus workouts.

Presta atención en estos tips para que logres que tus entrenamientos sean efectivos y aproveches al 100% el tiempo en que los llevas a cabo.

1. Respira correctamente: uno de los primeros puntos para evitar sofocarte al llevar a cabo tus rutinas es respirar bien, de esta manera podrás mantener tu oxigenación y resistencia. En realidad, aprender a respirar es tan importante como realizar bien los movimientos. Los malos hábitos al respirar afectan tu rendimiento y te pueden llevar a perder el interés por el ejercicio. Lo ideal es que inspires por la nariz y expires por la boca, aunque si estás haciendo ejercicio intenso te será difícil no tomar el aire por la boca. La pauta general más importante es: inhalar en reposo y exhalar durante el esfuerzo.

1. Lleva un buen ritmo: el ritmo que le imprimas a tu entrenamiento condicionará la aparición del cansancio. Si eres principiante, comienza con un ritmo bajo, que ronde el 65% de tu ritmo cardíaco. Los incrementos de ritmo deben ser progresivos para reducir el cansancio.

1. Hidrátate bien: los expertos recomiendan tomar dos litros de agua al día, lo cual te ayudará a oxigenar bien tu cerebro durante el día, a no retener líquidos y a explotar al máximo tu potencial mientras haces ejercicio. Bebe antes, durante y después de tu entrenamiento. Toma agua incluso si no sientes sed. Notarás si estás bebiendo suficiente si tu orina es de un color claro o de un amarillo muy pálido.

1. Protégete el clima: si realizas tus rutinas al aire libre, trata de que tu entrenamiento sea en días no tan calurosos. Intenta entrenar temprano en la mañana o tarde por la noche. Descansa frecuentemente en áreas con sombra o trata de permanecer del lado de la sombra mientras caminas o practicas running.

1. La ropa adecuada: parece un tip obvio, pero elegir tu outfit correcto y especial para realizar la actividad que practiques será un punto clave para evitar sofocarte. Recuerda que los colores más claros y las telas transpirables son buenas opciones.

Está en ti hacer que tus entrenamientos sean más fáciles y que de verdad logres tus metas para el bienestar y para mejorar tu salud. ¡Ponlo en práctica!