Identifica lo que estás haciendo mal en tu día a día y ahora empieza a cambiar.
Quizá no has prestado mucha atención, pero con frecuencia realizas ciertos hábitos sin detenerte a pensar si te benefician o perjudican, probablemente los incorporas a tu vida porque escuchaste que a alguien le funcionaron, sin embargo, ¿son buenos? Aquí te decimos algunos hábitos que no son tan saludables como pensabas.
- Ejercitarte en ayunas: Cuando te levantas quizá no sientas hambre ni quieras comer algo si vas a correr o ir al club, pero es importante saber que después de varias horas de ayuno, tu organismo necesita alimento.
- Correr sin calentar: Estás animado porque has logrado levantarte a correr todos los días y sales de tu casa frente al parque, te desperezas y comienzas a correr así sin más… ¡Cuidado!
- Tomar té todo el día: Prefieres tomar té a lo largo del día para quitarte la sed y crees que es un hábito saludable, no es que no lo sea, sólo que el té contiene teína y ésta posee un efecto diurético que hace eliminar el agua, con lo cual te puedes deshidratar.
- Evitar la sal completamente: Hay situaciones médicas por las cuales un especialista pedirá que suprimas la sal, pero si no te excedes nunca y tu salud es buena, no tienes por qué dejarla por completo.
- Consumir carne todos los días: Aunque es cierta la creencia de que incluir carne en la dieta diaria es bueno por las proteínas, hay otros alimentos que pueden sustituirla para lograr una alimentación mucho más variada y equilibrada.
- Bañarte con agua muy caliente o muy fría: Los cambios bruscos pueden dañar la piel; las temperaturas extremas remueven el aceite natural del órgano más grande de nuestro cuerpo, resecándolo. Se pone en riesgo la piel, que es la primera defensa contra las infecciones.
- Dormir más de 9 horas: Un estudio publicado en la revista especializada Sleep demuestra que dormir más de nueve horas podría ser síntoma de alguna enfermedad que aún no ha aparecido del todo.
- Fumo,pero me lavo los dientes y no me afecta: La Asociación Dental Mexicana afirma que las bacterias en la boca de los fumadores o exfumadores son diferentes a las de los no fumadores. Uno de los riesgos para quienes fuman es la periodontitis, una inflamación de las encías que hace que los dientes se aflojen al perder hueso.
- Trabajar horas extras para ser mejor empleado: Sabemos la importancia que tiene conservar un empleo, pero si tu vida gira solo en torno a este tema, es probable que tengas un estrés muy elevado. Recuerda que la mente y tu cuerpo necesitan descanso.
- Consumir refresco: El exceso de esta bebida carbonatada es causa de la aparición de cálculos renales, que impiden el buen funcionamiento de los riñones y como resultado una adecuada depuración del organismo.
Antes de que sea más tarde, dale un giro a tu vida y cambia estos hábitos para que goces de mayor bienestar en tu día a día.